NUEVA YORK, USA.- Denle la bienvenida a La Bestia. Este es el Tesla Semi, el vehículo que marca la entrada de la empresa de Elon Musk al mercado de camiones comerciales. Este es un camión semirremolque totalmente eléctrico que no quema gas, en teoría nunca necesitará reemplazar sus frenos, puede cubrir 500 millas (800 kilómetros) con una carga mientras lleva un cargamento y solo tiene unas pocas partes móviles. Eso, más una versión avanzada del piloto automático de Tesla, significa que este será fácilmente el semi más inteligente en el camino.

Aun así, eso dejará una simple pregunta en la mente de muchos: ¿por qué? Y, más específicamente, ¿por qué ahora? Con Tesla luchando para cumplir con sus propias metas de producción para el Model 3, parece un momento extraño para entrar en una industria casi completamente diferente como ésta. Al ver los números, sin embargo, y las cosas empiezan a tener sentido.

Según la American Trucking Association, la industria del transporte por camión generó US$726,000 millones en ingresos en 2015, empleando a 3.5 millones de conductores. Esto revela que es una gran industria, y una lista para la innovación y, a pesar de la escasez de conductores, esas innovaciones y eficiencias han tardado en llegar. Según Allen Smith de AskTheTrucker, los semis de nivel de entrada cuestan más de US$100,000, pero eso es solo el comienzo. Los costos anuales de diesel por sí solos pueden generar otros US$70,000, con costos operativos totales de alrededor de US$180,000 por año.

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El camión Tesla Semi quiere apoderarse de la carretera [fotos]

(Credit: Tesla)

Esas cifras realmente han disminuido un poco gracias a los menores costos de combustible, pero aun así es fácil entusiasmarse con el potencial del Tesla Semi. Aunque presumiblemente el camión será más caro al comienzo, con el costo drásticamente reducido de “combustible” (electrones en este caso, en lugar de diesel) esa diferencia debe ser algo más fácil de asumir. Tenga en cuenta el reducido servicio y mantenimiento gracias a la relativa simplicidad de un motor EV frente a uno de combustión interna tradicional, y todo esto tiene mucho sentido.

Pero todavía hay razones para el escepticismo sobre la entrada de Tesla en este mundo del transporte comercial. Los productos de Tesla son conocidos por su rendimiento, pero los problemas con los primeros ejemplares del Model X y otras quejas públicas llevarán a algunos a preguntarse si la compañía realmente puede entregar un producto con la confianza a prueba de balas requerida por una industria comercial.

Fuente.  Google