Por: Enmanuel Mera
PALMAREJO, VILLA GONZÁLEZ.- Detrás del humo aromático y un buen sabor, hay manos con maravillosas historias de vida que hacen posible que muchos fumadores de todo el mundo se lleven en la boca los cilindros de hojas mágicas llamados cigarros.
Uno de esos artistas de los cigarros es . Él es de un pequeño pueblo en la Providencia de Santiago en la República Dominicana llamado Villa González, municipio conocido por ser la tierra del mejor tabaco del mundo. Roque dice que su primer contacto con la hoja de tabaco fue cuando tenía siete años. “Recuerdo que mi abuela trabajaba en el asilo de tabaco y yo iba allí todos los días para llevarle la comida”. Él dijo.
Este artesano de puros que es un electricista profesional tiene más de veinte años de experiencia en la elaboración de cigarros, proviene de una familia con una larga tradición de la cosecha de tabaco desde la plantación de la semilla hasta el proceso de fermentación. “Cuando era adolescente, todas las mañanas antes de ir a la escuela secundaria, trabajé con el amigo de mi familia preparando la tierra para plantar”. Dijo que el experto en puros que comprende el amor y la pasión por el tabaco pasa de la vena de su familia generación tras generación.
Este artista de puros hechos a mano comenzó a hacer cigarros en los primeros años de la década de los 90 cuando la industria del tabaco explotó en todo el mundo. Ha trabajado en las fábricas más importantes en el negocio de puros, uno de ello
s es la famosa marca Davidoff, donde ocupó varios puestos de trabajo entre ellos, fabricación, supervisor y control de calidad.
“Davidoff era mi pequeña escuela, allí aprendí a conocer el tabaco y el cigarro”. Expresó Tejada, quien también ha visitado países en los cinco continentes como representante de la marca; trabajo que hizo durante el último año que estuvo en la compañía. “Fue un período del tiempo en el que aprendí e hice buenos amigos en la industria”
Sus manos negras dominicanas tienen la capacidad de hacer tanto en los procesos la construcción del cigarro. Envoltura y relleno.
Además sabe todo el proceso de hoja de tabaco antes de llegar a los clientes como un cigarro. “Nunca terminas de aprender sobre tabaco y cigarros. Este es un mundo lleno de sorpresas. Todos los días aprendes algo nuevo. Es un mundo impredecible “. Dijo Roque.
Ahora, como otros pequeños empresarios, Roque está tratando de impulsar su propia marca y desarrollar su mezcla con sabores distintivos poniendo en práctica su experiencia en el mundo de los cigarros. Él sabe que el proceso es difícil, pero tiene confianza y fe en Dios. Su proyecto se desarrollará pronto. “Soy un hombre fiel a Dios y sé que con mucho trabajo y esfuerzo mis cigarros van a ser disfrutados por los fumadores de todo el mundo”. Dijo el artesano con una fuerte creencia católica.
Al igual que Roque, hay muchos artesanos en los nueve municipios de la provincia de Santiago en la República Dominicana que buscan un lugar para poner sus creaciones en la boca de los fumadores. Tienen un talento y lo único que necesitan es la oportunidad de mostrar todas las cosas que le darían a la industria de los cigarros. Nuevos sabores, nueva visión empresarial. El cambio viene.
Fuente:elsoldesantiago.com