NEW YORK,USA.-El temor a que esta Nochevieja se repita un ataque como el del 19 de diciembre en Berlín, cuando un terrorista atropelló con un camión a una multitud, ha hecho que las principales ciudades refuercen sus medidas de seguridad para dar la bienvenida a 2017. Madrid, Berlín, París o Estambul han aumentado sus dispositivos para evitar posibles golpes terroristas. Además de un aumento de agentes en las zonas más concurridas, se han colocado barreras como bloques de hormigón que pesan toneladas para impedir el acceso a las zonas en las que haya aglomeraciones o, directamente impedir el paso de vehículos a estas zonas.
‘Campanadas 2017’, en Madrid
Maceteros, bolardos o incluso camiones bloquean el paso de vehículos pesados o de coches a determinadas calles cercanas al centro de Madrid. El dispositivo del Ministerio del Interior, bautizado Campanadas 2017, prevé que 25.000 personas acudan a medianoche a la Puerta del Sol para dar allí la bienvenida al año nuevo. El operativo se puso a prueba la noche del viernes con las llamadas preuvas, el ensayo general de las campanadas, a las que acudieron unas 19.000 personas.
El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, asegura que todo transcurrió “de manera magnífica” y que sirvió para “corregir detalles” de manera que este sábado “todo vaya todavía mejor”.
Los camiones y autobuses de más de 3.500 kilos tampoco podrán circular por Madrid entre los días 3 y 5 de enero durante la celebración de las cabalgatas de Reyes en los barrios de la capital. Con esta decisión, excepcional, el Ayuntamiento de Madrid pretende evitar un ataque terrorista similar a los de Berlín y Niza contra las multitudes de personas, sobre todos niños, que se concentran en las calles para los desfiles de estas fechas.
La Nochevieja vuelve a París
En toda Francia, van a ser casi 96.000 efectivos de seguridad (52.600 policías, 36.000 gendarmes y 7.000 gendarmes) los que tratarán de que la Nochevieja no se vea enturbiada por incidentes ni, sobre todo, por nuevos ataques yihadistas, teniendo en cuenta que la amenaza terrorista, según el ministro francés del Interior, Bruno Le Roux, “sigue siendo fuerte”.
En París, se restablecen algunos de los tradicionales festejos del 31 de diciembre que fueron anulados en 2015 tras la conmoción de los atentados yihadistas que golpearon la ciudad un mes y medio antes. Volverán, pero en medio de unas fuertes medidas de seguridad.
10.300 personas, entre policías, gendarmes, militares, bomberos y agentes municipales, participan en el dispositivo del área metropolitana de París, con la avenida de los Campos Elíseos como punto más sensible. En esa avenida y en sus alrededores se espera que cerca de 600.000 personas vuelvan a disfrutar de los clásicos fuegos artificiales de medianoche, precedidos desde tres horas antes por diferentes animaciones.
Las personas que quieran celebrar el Año Nuevo en el área de los Campos Elíseos, donde van a estar vigilando 1.700 agentes, tendrán que someterse a controles de bolsos, mochilas y abrigos, y la circulación va a estar cortada desde media tarde de este sábado.
Doble seguridad en Alemania
Grandes bloques de hormigón de toneladas de peso cerrarán el acceso al recinto de la llamada “milla de la fiesta” de Berlín, situada entre la Puerta de Brandeburgo y la Columna de la Victoria. A este lugar, de más de un kilómetro de largo, está previsto que acudan hasta un millón de personas por cuya seguridad velará un contingente policial de 1.800 agentes y 800 miembros de seguridad privada. Dentro del recinto, la policía dispondrá de equipamiento pesado, como cañones de agua, y parte de los agentes, tanto en los accesos como en el interior, portarán subfusiles.
También en Colonia, escenario en la Nochevieja pasada de situaciones de acoso, abusos sexuales y robos masivos, en las que estuvieron involucrados principalmente nacionales de países norteafricanos, pero también refugiados de Siria y Afganistán, las autoridades han redoblado las medidas de seguridad. 1.500 agentes patrullarán por las inmediaciones de la catedral y la estación, donde se produjeron los abusos, y el resto de puntos vulnerables. Además, tres compañías de seguridad privada pondrán a disposición un total de 503 guardias para velar por la seguridad en esa ciudad.
Londres corta al tráfico el centro
Unos 3.000 policías estarán a cargo esta Nochevieja de la seguridad de Londres con motivo de las celebraciones. La presencia policial será importante en el centro de la capital, en los alrededores del Big Ben, donde miles de personas se congregan para presenciar los fuegos artificiales sobre el río Támesis, y también en la céntrica plaza de Trafalgar. A partir de las 14.00 GMT la policía cortará el tráfico en el centro de la ciudad, incluyendo los concurridos puentes sobre el río Támesis de Lambeth, Westminster, Waterloo y Blackfiers.
Viena, Prada y Budapest a pesar de no tener amenaza concreta
Tanto Viena como Budapest y Praga aumentarán su vigilancia policial a pesar de que no hay indicios concretos de amenaza concreta.
Un total de 400 policías y 300 agentes de seguridad velarán por la seguridad de las decenas de miles de personas que celebrarán la llegada del Año Nuevo en las calles del centro de Viena. Buena parte de los agentes de seguridad no llevarán sus uniformes sino que estarán “de civil”.
También en Hungría habrá “una intensa presencia policial” debido al riesgo de terrorismo en Europa, según informó el ministerio de Interior húngaro en un comunicado. La alerta por terrorismo en este país está en el nivel 3 (grado medio).
Turquía despliega 17.00 policías en Estambul
La policía de Estambul desplegará un contingente de 17.000 agentes para garantizar la seguridad durante Nochevieja y cerrará al tráfico todos los accesos a la céntrica plaza de Taksim, donde suelen reunirse grandes muchedumbres para la celebración, según ha informado el diario Cumhuriyet. El año pasado fueron 15.000. “A diferencia del año pasado, también hemos tomado medidas en muelles, barcos de pasajeros, aeropuertos, metro y tranvía”, ha declarado el vicedirector de los equipos de seguridad locales, Zafer Baybaba, al medio local.