La derrota de Trump en Kentucky y Virginia da esperanzas a los demócratas para 2020

A un año para las presidenciales, los resultados en algunos de los estados que tuvieron elecciones este martes muestran signos preocupantes para los republicanos en zonas que han dominado tradicionalmente.

El fiscal general de Kentucky, Andy Beshear, que se postula para gobernador contra el titular republicano Matt Bevin, reacciona a los resultados de las elecciones estatales en su fiesta de vigilancia en Louisville, Kentucky, EEUU. Crédito: HARRISON MCCLARY/REUTERS

La mañana del miércoles, el gobernador de Kentucky y aspirante a la reelección Matt Bevin no había reconocido el triunfo de su rival demócrata Andy Beshear, en los comicios de la víspera que, tras el conteo del 100% de los votos, ha sido declarados “muy cerrados” por la agencia de noticias AP, que suele nombrar a los ganadores.PUBLICIDAD

Entre Beshear y Bevin hay unos 5,400 votos de diferencia, en un universo de 1,400,000 sufragios emitidos. Independientemente de quién sea proclamado ganador, es un revés para el respublicano quien en 2015 llego al puesto con 10% de diferencia frente a su contrincante en un estado considerado tradicionalmente conservador.

Donald Trump logró casi 30 puntos de ventaja en Kentucky en 2016 e invirtió tiempo y capital político en las elecciones de este martes.

Para la noche el presidente se distanciaba en un mensaje en su cuenta Twitter de lo que lucía como un resultado adverso asegurando que “los fake news me culparán” si se pierde Kentucky y aseguraba que su participación en la campaña había hecho subir 15 puntos en las encuestas a Bevin. En cambio los triunfos de otros 5 republicanos sí habrían sido mérito del presidente, de acuerdo a ese mismo mensaje.


La narrativa de Partido Republicano pone énfasis en cambio en los triunfos en Mississippi, donde Tate Reeves ganó la gobernación y la fuerza “energizadora” que, según la presidenta del partido, Ronna McDaniel, representa el presidente para la base conservadora.PUBLICIDAD

Desde que Trump llegó a la presidencia, los demócratas han acaparado las gubernaturas de estados como Kansas, Nueva
Jersey, Virginia, Michigan, Maine, Nevada, Nuevo México y Wisconsin.

En Virginia el Congreso estatal pasó a manos demócratas por primera vez desde 1993, siguiendo la tendencia que ha marcado al estado durante los últimos años.

Estas fueron las primeras elecciones desde que comenzó el juicio político contra el presidente y estuvieron marcadas por una alta participación electoral, donde las áreas suburbanas -que comúnmente se inclinan hacia los republicanos-, le dieron el favor a los demócratas; un indicador clave para las elecciones presidenciales de 2020.